Finanzas sostenibles, multilateralismo y bienes públicos globales

Uruguay emitió un bono soberano asociado a indicadores ambientales, un instrumento innovador para el financiamiento del desarrollo sostenible

10 de Julio de 2023

El apoyo a las acciones climáticas ha sido durante mucho tiempo un área clave de cooperación para el PNUD en Uruguay.

PNUD Uruguay

Uruguay ha dado un paso significativo hacia las finanzas sostenibles al ser pionero en la emisión de un bono soberano indexado a indicadores de sostenibilidad y cambio climático basados en las metas establecidas por el país en su Contribución Determinada a nivel Nacional (CND) al Acuerdo de París de la Convención Marco de las Naciones Unidas para el Cambio Climático. 

Esta iniciativa innovadora demuestra el compromiso de Uruguay con la sostenibilidad y el desarrollo económico bajo en carbono y ofrece un instrumento replicable con gran potencial en el escenario multilateral.

El apoyo a las acciones climáticas ha sido durante mucho tiempo un área clave de cooperación para el PNUD en Uruguay. Sobre la base de esta experiencia, el PNUD desempeñó un papel crucial en esta iniciativa, acompañando a Uruguay en su estrategia para alinear las finanzas con el desarrollo sostenible para lograr la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).

Esta acción estratégica soberana de Uruguay tiene el potencial de generar un cambio de paradigma en el campo de las finanzas sostenibles. El país, conocido por su fuerte tradición multilateral y sólidas políticas fiscales y climáticas, ha incluido dos condiciones inéditas al ejercicio habitual de emisión de deuda. Ha establecido objetivos climáticos ambiciosos, acordando pagar una tasa de interés más alta si no se cumplen estos objetivos y recibiendo una reducción en la tasa de interés si se superan.

Al aceptar este mecanismo de ajuste simétrico de tasas, los inversores institucionales que participan en esta transacción demuestran su compromiso de apoyar un bien público global. Esta propuesta, que inicialmente podría ser vista como potencialmente poco atractiva para el mundo financiero, superó las expectativas con una oferta de $1,500 millones de dólares y condiciones de mercado adicionales muy favorables.

 

"Esta acción estratégica soberana de Uruguay tiene el potencial de generar un cambio de paradigma en el campo de las finanzas sostenibles"

 

El éxito de Uruguay invita a reflexionar sobre si condiciones similares se pueden aplicar a otros contextos, a otros ámbitos de política pública o incluso escalar dentro del propio campo del cambio climático. Una respuesta afirmativa a cualquiera de estos tres aspectos abre un amplio abanico de posibilidades para alinear los recursos financieros con la generación de bienes públicos globales. La aplicación de una estrategia similar en países más grandes o megadiversos genera oportunidades que merecen un análisis más profundo.

La relevancia del multilateralismo en esta iniciativa no puede pasarse por alto. Los indicadores vinculados a este bono se alinean con las CND de Uruguay al Acuerdo de París, siguiendo las metodologías de medición y reporte establecidas por la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (CMNUCC) y el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC).

El ámbito multilateral proporcionó el marco necesario para desarrollar sistemas de medición, reporte y verificación de los compromisos climáticos nacionales, lo que permitió a Uruguay contar con metodologías probadas a nivel mundial para avanzar en este campo innovador.

Para promover y escalar este tipo de instrumentos, es crucial considerar las condiciones requeridas para crear un mecanismo global para financiar los costos de una tasa de interés más alta en caso de incumplimiento de las metas. Uruguay ha implementado un esquema de recompensas y sanciones que honrará con fondos soberanos si no se cumplen las metas. Explorar la posibilidad de un mecanismo global para promover tales esquemas de deuda y facilitar su adopción por un mayor número de países se convierte en una consideración clave en la búsqueda de bienes públicos globales.

El gobierno de Uruguay ha buscado el apoyo de organizaciones como el PNUD y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en este proceso innovador. El PNUD juega un papel crucial en la verificación del informe soberano sobre los indicadores de desempeño propuestos en el bono. Esta colaboración no solo ha desafiado al PNUD a pensar en nuevas oportunidades y modelos de cooperación, sino que también ha capitalizado los esfuerzos globales para ayudar a los países a cumplir sus compromisos climáticos.

 

Mirando hacia el futuro:
Los esfuerzos de Uruguay no son aislados. Otros países de la región y del mundo se están embarcando en trayectorias similares. El PNUD mantiene su compromiso de aprender y apoyar iniciativas que alineen la agenda financiera con el cumplimiento de la Agenda 2030 y sus ODS.